El Primobolan es uno de esos esteroides anabólicos que está rodeado de muchos mitos y leyendas, especialmente en los foros de Internet. Muchos afirman en dichos foros que la hormona no suprime la producción natural de testosterona, lo que la hace perfecta para un puente entre ciclos. Sin embargo, descubrimos que esto no es cierto: si bien su tasa de supresión es menor que la de muchos esteroides, sigue siendo bastante fuerte. Muchos también hacen suposiciones inexactas basadas en la capacidad del esteroide. Esto se debe en gran medida al estigma de Arnold que lo rodea y cuando los resultados no coinciden con la imagen que tienen en la cabeza, desarrollan una visión pobre e inexacta del Primobolan.